Your rating:
Beya sólo puede dormir o morir a manos de los hombres que la someten a sus deseos más violentos. Beya reza y duerme y recibe sus dosis de dolor hasta que llega finalmente una solución radical. Gabriela Cabezón Cámara sitúa a la Bella durmiente en un prostíbulo infecto de Buenos Aires y le da, con una poesía que roza lo imposible, su beso particular.
Publication Year: 2011
No posts yet
Kick off the convo with a theory, question, musing, or update
No reviews yet
Share a rating or write a review