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A Elliot le aterra casi todo. Desde el momento en que nació, su vida ha estado ligada a un miedo inexplicable hacia la mayoría de las cosas. Ahora, lo único que mantiene sus terrores a raya son las pastillas amarillas que toma diariamente; sin embargo, justo en Nochebuena, Elliot se queda sin medicina, entonces su madre tiene que salir a la farmacia para surtir otra receta. Parece que nada puede salir mal, sin embargo, después de un largo rato, ella no regresa. Elliot sospecha que algo sucedió, pero, ¿tendrá el valor para enfrentar sus miedos y salir a buscarla?
Publication Year: 2017
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Más como 3,5.
Muy bien.
El libro la verdad me pareció muy interesante, el autor sabe mantenernos en misterior durante todo lo largo del libro.
Este libro trata de un niño de 13 años que está muuuuy traumatizado, tanto que le da miedo casi “todo” desde santas, hasta la oscuridad.
Me gustó que abordará una enfermedad poco común, pero que igual pasa y no se mucho de esta enfermedad, pero creo que lo hizo muy bien, con todos sus miedos, su hermana y gente que lo quiere y se preocupa por el.
Elliot me pareció un personaje muy realista en lo que pueda caber, el tiene muchos miedos y en un giro tiene que salir solo de su casa para buscar a su madre por qué ya no tiene las pastillas que alejan su miedo, y su mayor miedo es él mismo, el otro el, el que no está bajo ninguna influencia de medicina, el que siente una ira enorme que crece hambrienta por todo su interior y tiene que ser controlada, en este viaje por buscar a su madre se encuentra a el mismo y hace las pases con su yo interno y sus miedos y se da cuenta que todos sus temores y angustias son lo que lo hacen estar vivo.
Me gusta que es fuera lo típico, no tanto como “niño enfermo al que le aterra todo, sale, enfrenta sus miedos y los supera” Kevin Brooks hace algo más, él no los supera, los acepta como parte de sí mismos y creo que todos deberíamos hacer eso, aceptar nuestras fallas y miedos, pero no dejar que controlen nuestra vida y nuestras acciones.